Te veo sonriente conmigo,
parece que jamás te fuiste mi amada.
Por cierto, feliz fuí contigo.
Jamás he olvidado esa madrugada,
el cielo se abrió refulgente
se oyeron melodías sacras por mi
amada;
y yo, resignado y silente.
Anduve condolido, siempre angustiado.
Jamás he podido olvidarte;
y cómo en las noches mustio he llorado.
No pude dejar de extrañarte.
Has vuelto, tu presencia tiene el aroma
de rosas que tanto he amado,
y ahora, me arrullas dulce cual paloma.
Me dices, jamás me has olvidado.
Iremos de la mano, juntos a tu cielo,
allende tu mundo irisado,
allá, conjugaremos nuestro gran anhelo,
seremos amor realizado.
En esta existencia fuiste mi amada,
también el continuum, mi nascencia.
Contigo el ocaso muere en la nada
quedó extinguida tu ausencia.
(Carlos Rafael)
el cielo se abrió refulgente
se oyeron melodías sacras por mi
amada;
y yo, resignado y silente.
Anduve condolido, siempre angustiado.
Jamás he podido olvidarte;
y cómo en las noches mustio he llorado.
No pude dejar de extrañarte.
Has vuelto, tu presencia tiene el aroma
de rosas que tanto he amado,
y ahora, me arrullas dulce cual paloma.
Me dices, jamás me has olvidado.
Iremos de la mano, juntos a tu cielo,
allende tu mundo irisado,
allá, conjugaremos nuestro gran anhelo,
seremos amor realizado.
En esta existencia fuiste mi amada,
también el continuum, mi nascencia.
Contigo el ocaso muere en la nada
quedó extinguida tu ausencia.
(Carlos Rafael)
No hay comentarios:
Publicar un comentario