(Versos libres)
Inexorable pasó el tiempo,
tantas cosas nos sucedieron
desde que nos distanciamos
en la bruma del desencuentro.
Al volver a verte renací,
mi alma lloró de alegría;
al oír tu enternecida voz,
supe que aún me amabas.
Jamás has sido olvidada,
te buscaba por doquier
nunca dejé de amarte;
y cómo dolía tu ausencia.
Tu sonrisa, aún me subyuga
desde aquella primera vez
cuando te besé locamente,
y fuimos conjunción intensa.
Eres mi vida irrenunciable,
felicidad puntual, precisa
e ineluctable en el tiempo,
causa de mis sentimientos.
Mi irrevocable primavera,
te hiciste más hermosa;
eres mi Venus que soñé
desde antes de conocerte.
Esta tarde, me diste tu amor,
en nuestro nido como tisú.
Ahí fuimos cohesión intensa
con fervor indescriptible.
Afuera, la llovizna se extasiaba
al saber que nos amábamos,
al saber que volvimos
por siempre inseparables.
Carlos Rafael
Imagen de Pinterest