Fue tan fácil olvidarte
que no pude ni buscarte.
Y pensar que te amaba,
yo contigo deliraba.
Tu perfidia ha dolido,
a mi alma ha herido.
Yo he muerto tantas veces
en mis días tan agraces.
Cercenaste los jazmines
del jardín a escondidas.
Y también mis ilusiones,
por vos fueron mutiladas.
Un dolor desconocido,
me estaba flagelando;
y mi cuerpo aterido,
te estaba olvidando.. .
Ya no tienes la fragancia
del vergel paradisíaco,
ya no eres su sustancia,
y tu rostro es elegíaco.
Darlos Rafael
Imagen de Internet
No hay comentarios:
Publicar un comentario