Etiquetas

NO HAY CALMA

Gozamos el oleado

irrestricto del amor prohibido,

el encanto del edén adulcido,

amor que fue copioso.


Contigo ha flagrado

la pasión que yo jamás esperaba,

con tu néctar me sentí extraviado;

y, cómo te amaba.


Ansioso he deshojado

la blancura de tu cuerpo divino.

De tu boca, tu amor me has dado

a dulce rojo vino.


Belleza estuante

provocaste confusión en mi alma

que añora tu amor acezante,

en mí, ya no hay calma.


Distantes discurrimos  

soportando el aciago momento 

que parece extinguir lo que fuimos.

Atroz es el tormento.


Intento olvidarte,

desespera no poder conseguirlo;

me resisto, no quisiera pensarte,

difícil es lograrlo. 


No niego, he decaído,

se me hace tan horrible la vida

soportando con pavor tu olvido

con el alma aterida.


(Carlos Rafael)

No hay comentarios:

Publicar un comentario

DOLENS

Desde que te has ido, mis indefinibles noches tienen el cielo más oscuro; el frio, congela hasta mi alma. A mi alrededor, todo es desolación...